27 ago
2024
El mundo del fútbol está de luto tras la noticia del fallecimiento de Sven-Goran Eriksson, un destacado y respetado entrenador que dejó una marca imborrable en este deporte. Eriksson, conocido cariñosamente como el ‘caballero del fútbol’ por su estilo elegante y su capacidad para dirigir equipos con una mezcla de calma y firmeza, falleció a la edad de 76 años en su casa de Björkefors, Suecia. Su partida se debió a un cáncer de páncreas, una enfermedad que enfrentó con la dignidad y fortaleza que lo caracterizaron a lo largo de su vida.
Sven-Goran Eriksson inició su carrera en el mundo del fútbol como jugador, pero fue en la gestión y dirección de equipos donde encontró su verdadera vocación y su mayor éxito. A lo largo de su ilustre trayectoria, dirigió a varios clubes prominentes que incluyeron a la Roma, Fiorentina y Lazio en Italia, el Benfica en Portugal y el Manchester City en Inglaterra. Cada uno de estos equipos se benefició de su vasta experiencia y de su talento para entender y manejar el juego y a sus jugadores.
Sin embargo, el período más famoso y resonante de su carrera llegó cuando asumió la dirección del equipo nacional de Inglaterra en 2001. Durante los cinco años que estuvo al frente del equipo, Eriksson llevó a Inglaterra a dos cuartos de final de la Copa del Mundo, en 2002 y 2006. En ambas ocasiones, el equipo fue eliminado por potentes rivales; Brasil en 2002 y Portugal en 2006. A pesar de no haber logrado el título mundial, su contribución fue significativa y su impacto, indiscutible.
Más allá de sus logros en el campo, Eriksson será recordado por su estilo de liderazgo inconfundible. Su habilidad para manejar situaciones de alta presión con una tranquilidad casi impasible, combinada con un carisma que le permitió ganarse el respeto y la admiración tanto de sus jugadores como de sus colegas entrenadores, son aspectos de su persona que serán eternamente recordados. Su capacidad para inspirar y motivar a sus equipos fue tan importante como su conocimiento táctico y estratégico del fútbol.
La noticia de su fallecimiento ha generado una ola de reacciones emotivas en el mundo del fútbol. Figuras prominentes del deporte, jugadores actuales y retirados, así como otros entrenadores, han compartido mensajes de condolencia y recuerdos personales que reflejan la profunda huella que Eriksson dejó en sus vidas y carreras profesionales. Su figura trasciende las fronteras y nacionalidades, ejemplificando el poder unificador del fútbol.
Entre los homenajes, destacan las palabras de David Beckham, quien jugó bajo su dirección en el equipo nacional inglés. Beckham recordó a Eriksson como “un verdadero caballero” y
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