Cuando hablas de Pau Cubarsí, defensa central español que juega para el FC Barcelona y surgió de la cantera de La Masia. También conocido como Pau Cubarsí i Rovira, es uno de los futbolistas más prometedores de la última generación en España, con un juego maduro que sorprende por su edad. Apenas tiene 18 años, pero ya se ha convertido en titular indiscutible en el Barça, algo que no pasaba desde hace décadas con un central tan joven.
Lo que hace especial a Pau no es solo su talento técnico, sino su cabeza. Juega con calma bajo presión, lee el juego como un veterano y no se deja llevar por los errores ajenos. Su conexión con los mediocentros del Barça —como Gavi o Pedri— es clave para que el equipo salga jugando desde atrás. Y no es un fenómeno aislado: su estilo se parece al de Piqué en su juventud, pero con más movilidad y una mejor salida de balón. El Barça no lo compró, lo crió. Y ahora, cuando otros clubes grandes lo quieren, el club sabe que tiene un tesoro que no se vende fácilmente.
La relación entre Pau Cubarsí y La Masia es un ejemplo de lo que puede lograr un buen proyecto formativo. No es un caso raro, pero sí es raro que un chico de 17 años se estrene en Champions League y no se derrumbe. Él no busca la fama, solo el balón. Y eso lo hace diferente. En los últimos meses, sus actuaciones contra equipos como Real Madrid, Bayern o Napoli han sido analizadas por técnicos de toda Europa. Su capacidad para recuperar balones en espacios reducidos y su precisión en los pases largos lo convierten en un jugador moderno, ideal para el fútbol actual.
Si quieres saber cómo va su temporada, qué partidos ha jugado, si está cerca de debutar con la selección española o qué dicen los entrenadores de él, aquí tienes todo lo publicado hasta ahora. No son solo resultados, son historias de un chico que está redefiniendo lo que significa ser joven en el fútbol de élite.
Pau Cubarsí, defensor central del Barcelona, enfrenta incertidumbre para el próximo partido contra la Real Sociedad tras sufrir una grave lesión facial en Belgrado. Aunque la herida requirió diez puntos, no hubo fracturas óseas, por lo que descartaron el uso de una máscara protectora. El club sigue evaluando si podrá jugar, priorizando su recuperación. Si no juega, Hansi Flick considera adaptaciones tácticas para el equipo.