Multas en Chile: qué son, cuándo se aplican y cómo evitarlas

Una multa, una sanción económica impuesta por una autoridad por incumplir una norma legal. También conocida como sanción administrativa, es una herramienta que el Estado usa para hacer cumplir las leyes sin necesidad de ir a juicio. En Chile, las multas no son solo para quienes exceden el límite de velocidad: van desde no usar el cinturón hasta dejar de cumplir con el voto obligatorio. Lo que mucha gente no sabe es que una multa puede salirte más cara de lo que parece, no solo en dinero, sino en tiempo, trámites y hasta puntos en tu licencia.

El Servel, el organismo encargado de organizar las elecciones en Chile. También conocido como Servicio Electoral, es uno de los principales emisores de multas que pocos esperan: las por no votar. Si eres ciudadano chileno entre 18 y 70 años, votar es obligatorio. Si no lo haces y no te excusas a tiempo, te cobran una multa. En las elecciones de 2025, más de 200 mil personas fueron designadas como vocales de mesa, y muchos de ellos no quisieron aceptar el rol. Pero si no te excusas antes del plazo, también te multan. Y no es una multa pequeña: puede superar los 20 mil pesos. Lo mismo pasa si no te presentas como vocal de mesa: la sanción es automática y se registra en tu historial electoral.

Las multas de tránsito son las más comunes, pero también las más evitables. Si te pasas un semáforo en rojo, usas el celular mientras conduces, o no llevas el seguro del auto al día, el sistema de cámaras o un carabinero te pueden sancionar. Y no es solo el dinero: cada infracción suma puntos negativos en tu licencia. Si llegas a 20, te retiran el permiso. Además, hay multas que no ves venir: como no tener la tarjeta de circulación al día, o no cambiar los neumáticos cuando están desgastados. Muchas veces, la multa llega por correo, y si no la pagas en el plazo, se incrementa.

Y no solo hay multas por cosas que haces, sino por cosas que no haces. Olvidar declarar impuestos, no renovar el patente, no presentar el certificado de emisiones, incluso no participar en un simulacro de emergencia si vives en una zona de riesgo —todo eso puede generar una multa. En Valparaíso, por ejemplo, si no te sumas al simulacro sismo-tsunami, podrías recibir una notificación del SENAPRED. No es una advertencia, es una sanción.

La buena noticia es que muchas multas se pueden evitar con un poco de atención. Revisa tu correo con frecuencia, mantén tus documentos al día, y si te designan como vocal de mesa, no ignores la notificación. Si ya tienes una multa, no la ignores tampoco: pagarla a tiempo te evita intereses y complicaciones. En Chile, el sistema de multas no es caprichoso: es mecánico, y funciona. Lo que tú puedes controlar es si decides estar al tanto o esperar a que te alcance la notificación.

En esta colección de noticias, encontrarás casos reales de multas que afectaron a personas comunes, desde sanciones por no votar hasta multas por infracciones deportivas o de seguridad pública. No son solo cifras: son historias de quienes no sabían, de quienes lo olvidaron, y de quienes decidieron actuar a tiempo. Aquí no hay teorías, solo hechos. Y lo que aprendas aquí, te puede ahorrar dinero, estrés y un montón de trámites innecesarios.