Defensa de un Diputado bajo la Lupa

El diputado chileno Gonzalo Kaiser, perteneciente al Partido Republicano, se encuentra en el ojo del huracán tras sus polémicas declaraciones sobre el consumo de drogas entre los conscriptos del Ejército de Chile. La polémica declaración se dio en el contexto de una discusión sobre un proyecto de ley que busca reformar el Sistema de Justicia Militar. Según Kaiser, sus palabras fueron malinterpretadas y sacadas de contexto, generando una tormenta de críticas tanto por parte de la ciudadanía como de sus colegas parlamentarios.

Kaiser afirmó que su intención nunca fue deshonrar la memoria de Franco, un joven conscripto que falleció en el año 2020 en circunstancias aún no aclaradas, y cuyos familiares todavía buscan justicia. En su lugar, Kaiser quería subrayar un problema sistémico dentro del Ejército: el consumo de drogas. Para el diputado, este es un asunto que merece una investigación profunda y transparente, ya que considera que es más extendido de lo que se cree y que podría tener consecuencias serias para la institución y para la sociedad en general.

Un Problema Sistémico, Según Kaiser

Gonzalo Kaiser afirmó que el consumo de drogas dentro del Ejército chileno no es un fenómeno aislado, sino una situación que ha venido incrementándose y que pone en riesgo a los propios conscriptos y a la integridad de las operaciones militares. Las declaraciones de Kaiser se produjeron durante la presentación de un proyecto de ley que busca responsabilizar a los militares por violaciones a los derechos humanos y aumentar la transparencia del sistema de justicia militar.

“No es solo Franco,” explicó Kaiser. “Hablar de consumo de drogas en el Ejército es necesario porque estamos frente a un problema urgente que requiere una respuesta contundente. No mencioné a Franco para desprestigiar su memoria, sino para argumentar en favor de una investigación que abarque a toda la institución.”

Amenazas y Reacciones

Tras la controversia, Kaiser reveló que ha recibido múltiples amenazas de muerte e intentos de intimidación. Según el diputado, esto demuestra la necesidad de abrir un debate más amplio y honesto sobre la situación en el Ejército, no solo en cuanto al consumo de drogas, sino también en relación a la cultura de la intimidación y la falta de transparencia.

Ante las reacciones adversas de la opinión pública y de sus colegas políticos, algunos de los cuales han pedido su renuncia, Kaiser se mantiene firme en su postura.