Salud, el estado de bienestar físico, mental y social de una persona. También conocida como bienestar, es algo que todos llevamos en la mochila, pero pocos cuidamos hasta que algo se rompe. No se trata solo de no tener fiebre o no sentir dolor. La salud es lo que te permite levantarte, caminar, reír, trabajar, y hasta preocuparte por lo que viene. Y hoy, más que nunca, entenderla significa entender lo que pasa en tu cuerpo, en tu país y en el mundo.
La obesidad, una enfermedad crónica caracterizada por el exceso de grasa corporal que afecta la función física y metabólica ya no es solo un tema de estética. En Estados Unidos, el gobierno de Biden propone cubrir medicamentos como Wegovy y Zepbound con Medicare y Medicaid, reconociendo que la obesidad no es culpa de la persona, sino una enfermedad que necesita tratamiento. Esto podría cambiarle la vida a más de 7 millones de personas. Aquí en Chile, también hay gente luchando contra esto, con menos apoyo, pero igual de determinación.
Y no solo la obesidad. El mpox, una enfermedad vírica anteriormente llamada viruela del mono, que se transmite por contacto cercano y puede causar fiebre, lesiones en la piel y fatiga ha vuelto a alertar al mundo. La OMS lo declaró emergencia internacional, porque no es un problema lejano: puede llegar a cualquier ciudad, a cualquier barrio. La prevención no es solo de los hospitales, es de todos nosotros. Saber qué síntomas buscar, cómo protegerse, y no ignorar lo que no entendemos —eso es salud también.
Algunas personas descubren que tienen algo raro. Como Francini Amaral, una figura pública que compartió su diagnóstico de un cáncer poco común, tras meses de síntomas confusos y médicos que no encontraban la causa. Su historia no es de fama, es de persistencia. Ella no se rindió. Y eso es lo que muchas personas necesitan escuchar: si algo no te parece normal, insiste. Busca una segunda opinión. Tu cuerpo te habla, aunque no sea en palabras claras.
Y mientras tanto, el COVID-19, una infección viral que sigue circulando, incluso en personas vacunadas y con refuerzos, no se fue. Joe Biden lo volvió a tener. A sus 81 años, con todas las vacunas del mundo, el virus lo alcanzó. No es un mensaje de miedo, es un recordatorio: la salud no es un estado final. Es un equilibrio constante. Las vacunas ayudan, pero no son un escudo mágico. El aislamiento, el descanso, la atención temprana —esos son los verdaderos pilares.
Lo que encontrarás aquí no son artículos técnicos ni listas de consejos genéricos. Son historias reales, decisiones reales, y datos que importan. Desde lo que pasa en Washington hasta lo que vive una vecina en Valparaíso. No te vamos a decir que todo está bien. Pero sí te vamos a mostrar qué está pasando, por qué importa, y qué puedes hacer con esa información. Porque la salud no se espera. Se entiende. Se pregunta. Se exige.
El gobierno de Biden ha presentado una innovadora propuesta para incluir medicamentos para la pérdida de peso, como Wegovy y Zepbound, en las coberturas de Medicare y Medicaid. Esta medida podría beneficiar a más de 7 millones de estadounidenses clasificados como obesos, reconociendo la obesidad como una enfermedad tratable. Sin embargo, enfrenta oposición política y podría costar a los contribuyentes hasta 35 mil millones de dólares en la próxima década.
La OMS ha declarado una emergencia sanitaria internacional debido a un brote significativo de mpox, antes conocido como viruela del mono. La rápida propagación del virus ha generado preocupación mundial y busca movilizar recursos internacionales para contener el brote.
Francini Amaral, conocida figura pública, ha revelado recientemente su diagnóstico de un raro tipo de cáncer. En una entrevista sincera, Amaral habló sobre los síntomas inusuales y el difícil proceso de diagnóstico. Subrayó la importancia de la persistencia y de buscar ayuda médica ante los primeros signos de malestar, así como el apoyo recibido de sus seres queridos y el equipo médico.
El Presidente Joe Biden, de 81 años, ha dado positivo por COVID-19 por segunda vez, con síntomas leves como secreción nasal y tos. A pesar de estar completamente vacunado y con dosis de refuerzo, Biden sigue experimentando infecciones. Actualmente, se ha aislado en su residencia de Rehoboth Beach, Delaware, siguiendo las directrices de los CDC.